Imagínate miles de personas haciendo fila para ingresar al Camino Inca. Cada obstáculo provoca un embotellamiento, el lugar está lleno de basura y no hay espacio para la higiene personal. ¿Entiendes? Así era la situación en el Camino Inca antes de que se involucrara el gobierno de Perú.
En el año 2002, el gobierno introdujo un sistema de permisos para el conocido Camino Inca. El sistema generó un cambio rotundo en esta popular ruta a Machu Picchu. La situación de este Patrimonio Mundial de la UNESCO necesitaba las medidas. Desde entonces, el número máximo de visitante que se aceptan es de 500 personas por día. Además, hay un límite en el número de turistas en Machu Picchu: 2500.
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