Travesía Avanzada de los 3 Refugios: Ter y Freser

La ruta comienza en el pueblo de piedra de Queralbs y sigue el salvaje valle alto del Río Freser. El sendero sube rápidamente de manera constante a través de bosques y gargantas rocosas, siempre al lado del río. Poco a poco, el paisaje se abre para revelar una amplia cuenca alpina donde se encuentra el aislado Refugio Coma de Vaca, rodeado de imponentes picos pirenaicos.

Empiezas caminando por un camino hasta encontrarte con el Río Freser, luego sigues sus orillas río arriba por un sendero bien marcado. La ruta sube entonces por un bosque sombreado y pasa por cascadas, entrando en las estrechas Gorges del Freser a través de tramos de senderos estrechos de roca y grava, pasarelas y cortos y empinados zigzags junto al torrente y la vegetación del bosque.

Al salir de la garganta, el valle se ensancha, la pendiente se vuelve más pronunciada a veces, y el sendero cruza pastos y laderas pedregosas con vistas de Balandrau (2,585 m) y Puig de Fontlletera (2,581 m). Un último ascenso moderado a través de praderas abiertas lleva directamente al Refugio Coma de Vaca, que está situado en una terraza sobre el río. Allí te esperan la cena, calor y habitaciones con literas.

Este paso de alta montaña conecta dos refugios remotos a través del horizonte de granito de los Pirineos orientales. Comenzando en la tranquila cuenca de Coma de Vaca, la ruta asciende hasta la cresta fronteriza antes de descender al accidentado Valle de Carança en Francia. En el camino, pasarás por debajo de los picos de Bastiments (2,881 m), Pic de la Dona (2,702 m) y Gra de Fajol (2,714 m), disfrutando de vistas panorámicas de crestas y circos. Luego llegarás a un refugio aislado entre pinos y pastizales.

Desde allí, el camino sigue un sendero claro y marcado con cairns a través del alto Valle de Freser. Pronto se empina entre rocas y hierba alpina hasta llegar al Coll de la Marrana (2,530 m). El ascenso continúa hacia un amplio circo anidado bajo los flancos rocosos del pico Bastiments. Aquí, el panorama se abre para revelar vistas de los picos circundantes de tres mil metros.

Un último empujón te llevará a un amplio collado fronterizo entre Bastiments y Pic de la Dona a 2,820 m, el punto más alto del día. El paisaje cae repentinamente hacia Francia, con la cresta dentada de Carança extendiéndose bajo tus pies. Desde el Coll de la Geganta (2,606 m), el sendero gira al norte y continúa con un largo descenso hacia la cuenca de Carança. Primero, pasa por laderas pedregosas, luego cruza terrazas más suaves y herbosas donde a menudo pastan los íbices.

El valle se estrecha de nuevo y una última travesía a través de un bosque de pinos conduce al Refugio del Ras de la Carança, que está anidado en una repisa sobre el torrente. Aquí, puedes dejar tu mochila, disfrutar de una bebida en la terraza y acomodarte en los dormitorios para pasar la noche.