Recorre el Camino de Santiago: Rutas, Costes y Mapas

El Camino de Santiago es un antiguo sendero que conduce a Santiago de Compostela. Este Camino nació en la Edad Media, cuando se descubrió la tumba del apóstol Santiago el Mayor. El descubrimiento de los restos provocó una oleada de peregrinaciones de católicos ansiosos por visitar la catedral de Santiago de Compostela, donde se encuentra su cripta. Aunque comenzó como una ruta de peregrinación religiosa, ha desempeñado un papel fundamental en el desarrollo de la identidad europea, su comunicación y el intercambio de ideas y proyectos.

Todas las rutas del Camino terminan en Santiago de Compostela, provincia de A Coruña, España. Sin embargo, los peregrinos vienen desde toda Europa para visitar la catedral. La mayoría de los excursionistas caminan los últimos 100 kilómetros de cualquiera de las rutas que comienzan y terminan dentro de España.

Como ya hemos dicho anteriormente, todas las rutas llevan a Santiago de Compostela. Sin embargo, las rutas provienen de diversas direcciones. Por ejemplo, el Camino Francés comienza en Sarria, mientras que el Camino Portugués comienza en la frontera española con Portugal, en Tui. Aquí tienes una lista con los puntos de inicio y fin de cada ruta:

Camino Francés parte Española: Sarria - Santiago de Compostela

Camino Francés Completo: Saint-Jean-Pied-de-Port - Santiago de Compostela

Camino Primitivo: Lugo - Santiago de Compostela

Camino Primitivo Largo: Oviedo - Santiago de Compostela

Camino Portugués: Tui - Santiago de Compostela

Camino Inglés: Ferrol - Santiago de Compostela

Camino a Finisterre: Santiago de Compostela - Santiago de Compostela

Si estás buscando un mapa con las diferentes rutas, aquí tienes el de uno de nuestros socios de senderismo, Viajes del Peregrino:

Ahora bien, esta es una pregunta difícil. La mayoría de las rutas cuentan con una versión de 1 semana que generalmente consiste en los últimos 100 kilómetros de esa ruta en concreto. Así que una respuesta fácil sería: el Camino de Santiago tiene 100 kilómetros de longitud y necesitarás 7 días para completarlo. Sin embargo, como explicamos anteriormente, también puedes hacer cualquiera de las rutas completas. En ese caso, necesitarás más días. Las versiones más largas suelen durar 2 semanas, pero si quieres ser un verdadero peregrino, puedes hacer la versión completa de 31 días del Camino Francés, que abarca 765 kilómetros.

Como mencionamos anteriormente, hay varias rutas que conducen a Santiago de Compostela. Aquí tienes una breve descripción de cada una de ellas:

Camino Francés

El Camino Francés es uno de los senderos más populares y no es difícil entender por qué. Si quieres hacer un tour de senderismo en Francia, entonces el punto de partida de este trekking será el corazón de los viñedos franceses, seguido de las montañas del norte de España y terminando en Galicia, en la catedral de Santiago de Compostela. Los espléndidos paisajes y la hospitalidad de la gente harán que tu viaje sea inolvidable. También puedes comenzar el trekking dentro de España y hacer una versión más corta del Camino Francés desde Sarria.

Camino Portugués

El Camino Portugués es una buena alternativa al Camino Francés si buscas una experiencia en áreas más rurales con senderos menos transitados. Puedes hacer los últimos 100 km del Camino, desde la frontera entre Portugal y España, o puedes recorrer la ruta completa desde Lisboa. Disfruta de impresionantes paisajes campestres, prueba el mejor vino de Oporto y visita ciudades y pueblos históricos.

Camino Inglés

El Camino Inglés no comienza en el Reino Unido o Inglaterra, como podrías pensar. Esta es la ruta tradicional seguida por los peregrinos que vienen de las Islas Británicas e Irlanda, comenzando desde las ciudades portuarias españolas de A Coruña y Ferrol. Sigue una épica ruta costera a través de los bosques y campos del norte de Galicia. Dado que esta es una de las rutas más cortas, asegúrate de caminar al menos 100 km para recibir la Compostelana, el Certificado Oficial de Peregrinación a Santiago de Compostela.

Camino a Finisterre

La Ruta a Finisterre es la única que comienza en Santiago y se dirige hacia el oeste hasta alcanzar la costa gallega. El camino hasta Finisterre te llevará a través de pueblos antiguos, bosques y a lo largo de la escarpada costa gallega donde podrás disfrutar de la fresca brisa marina. Dato curioso: se pensaba que Finisterre era el fin del mundo y de ahí viene el origen del término: Finis (fin) Terre (mundo).

Camino Primitivo

Esta ruta es considerada el Camino de Santiago original. El rey Alfonso II de Asturias fue el primero en caminar desde Oviedo hasta Santiago para rendir homenaje a los restos de Santiago. En la primera etapa, caminarás por los mismos lugares que Alfonso II y en el duodécimo día, te unirás al Camino Francés desde Melide.

Si estás haciendo senderismo en Europa, la mejor temporada para hacerlo es prácticamente la misma para todos los trekkings. No importa si estás haciendo senderismo en Creta o por el Camino de Santiago, la primavera y el otoño son siempre las opciones más recomendables. Es decir, de marzo a mayo y de septiembre a noviembre. Durante estas temporadas, el clima no es extremo y todos los hoteles y restaurantes a lo largo del Camino están abiertos. Si prefieres menos peregrinos en los senderos, también puedes hacer el Camino en invierno, pero ten en cuenta que durante esta temporada, la lluvia, el viento y las heladas son frecuentes, e incluso es posible encontrar nieve en los tramos más altos, como en Roncesvalles u O Cebreiro. Además, algunos restaurantes y hoteles prefieren permanecer cerrados durante estos meses. El verano es el momento más popular para hacer el Camino. Si eliges esta temporada, prepárate para hoteles y restaurantes llenos, senderos más concurridos y temperaturas más elevadas.

La credencial del peregrino acredita al viajero como peregrino y certifica su paso ordenado por los diferentes pueblos y aldeas en cualquiera de las rutas jacobeas. Incluye los datos personales del peregrino, espacio para los sellos e información útil sobre el Camino de Santiago, con mapas y rutas.

Puedes obtener la credencial del peregrino en una de las muchas asociaciones de peregrinos, hoteles, iglesias o en una de las Cofradías del Apóstol Santiago. No tendrás problemas para conseguirla al inicio de tu caminata, son muy fáciles de obtener. También puedes preguntar en el punto de información turística, te dirán el lugar más cercano para hacerte con ella.

La credencial está llena de casillas en blanco en las que el peregrino deberá colocar los sellos que certifiquen su paso por los diferentes pueblos de la ruta. Puedes obtener estos sellos en albergues, asociaciones de peregrinos, parroquias y también en la oficina de correos de cada pueblo.

Este es uno de nuestros temas favoritos. Debes tener en cuenta que estarás caminando durante días y necesitarás energía. Sin embargo, trata de no llenarte demasiado cada vez que te sientes a la mesa para que cuando tengas que ponerte en marcha, no te sientas demasiado pesado. Es muy importante controlar lo que comes a lo largo de los senderos.

Ahora, hablemos de la parte divertida: la comida. A lo largo de la ruta encontrarás muchos restaurantes y tascas con platos típicos de la región como empanadas, caldo gallego, lacón con grelos o pulpo a feira (el mal llamado pulpo a la gallega). ¡Prepárate para vinos deliciosos, buen pan y mucho marisco! Te recomendamos que te tomes tu tiempo para descansar de toda la caminata, charlar con otros peregrinos, disfrutar del entorno y probar platos tradicionales cada día. Si te preocupa el precio, muchos restaurantes ofrecen un menú del día especial para los peregrinos que hacen el Camino a un precio razonable.

Esta caminata es bastante fácil, incluso niños y personas mayores la recorren sin problemas, y probablemente tú tampoco tengas ningún inconveniente. Seamos sinceros, no es como si estuvieras escalando el monte Everest. Sin embargo, estarás caminando durante varios días, así que es mejor que te prepares. Intenta caminar unas horas al día en las semanas previas y usa el mismo calzado que usarás durante la caminata para evitar ampollas o lastimar tus pies. Otra buena idea es caminar con una mochila en los hombros para que tu espalda se acostumbre al peso.

Puedes hacerlo, pero no es necesario. Si deseas llevar tu equipaje en una mochila a lo largo del camino, puedes hacerlo. Sin embargo, la mayoría de las agencias organizan el traslado del equipaje desde tu hotel hasta el siguiente. El límite de peso suele ser de unos 20 kilos por excursionista. Tus maletas serán recogidas cada mañana en el vestíbulo del hotel/pensión y estarán esperándote en tu próximo alojamiento una vez que llegues allí por la tarde-noche. De esta manera, solo tendrás que preocuparte por disfrutar del paseo. ¿Práctico, verdad?